Latidos que desgarran, que se convierten en una fina cuchilla, en un pedazo de sentimiento, en una espina de bestialidad, en un susurro de oscuridad, en un golpe de viento...
"Imáginate sin miedos mi amor, y recréate en la vida derrumbándose dentro de su impulso insuficiente. Es demasiado enorme para probar una sola manera de intentar entendernos" La llamada del mar - Emilio Santiago Muiño